
-Pa' que me preguntai eso, no se supone que ya estamos pololiando?
-Yo no te he preguntado, y tu tampoco a mi. Como compruebo que nuestra relación es cierta ?- Dijo Raúl bastante serio.
-En todo caso, bueno pero igual es inútil tu pregunta porque ya sabí' que te voy a contestar.-
-No, no sé, porque después de las cagás que me mande, me podí contestar cualquier cosa.
-Obvio que si po' Raúl, si te amo con todo el corazon, eres mio, y de nadie mas desde ahora en adelante.
Se besaron y caminaron hasta que oscureció.
Luego de irse del mall, decidieron salir a bailar un poco, fueron a un club que Raúl conocía. Era bastante retirado, y escondido, como si algo que pasaba en ese club no debería pasar.
-Aquí es, lista?
-Dale, vamos.
Al momento de entrar Samanta sintió como una patada en la güata, el olor era repugnante, se veía gente votada en el suelo, y aunque la música era genial, sentía solo ruidos, horribles y desagradables.
-Pa' onde chucha me trajiste Raúl?!-
-Ahora que estamos pololiando es momento de que tu conozcas mi vida Samanta.
Samanta, incómoda, acepto. Raúl le presentó amigos, y de la nada, un trago llegó a su mano, estaba tan sedienta que lo probó sin darse cuenta de la pastilla que éste contenía en el fondo.
....
-Qué hora es?, Raúl ?, olle, Raúl?
Estaba sola en su departamento, aunque se había quedado la chaqueta de Raúl. No recordaba nada, absolutamente nada de lo que había pasado la noche anterior, excepto de que probó ese trago.
Eran las tres y media, pero no tenía hambre. Se miró en el espejo, y hasta ella misma se desconocía, estaba horrible, con los ojos rojos, y unas ojeras enormes.
Llamó a Raúl a su celular, pero Raúl no contesto. Así que se vistió y bajo para ir a verlo a su departamento. Buscó las llaves de su Maruti... las llaves...
Bajó y vió que su Maruti tampoco estaba en el estacionamiento, desesperada subió y llamó a Melisa, y le contó todo.
-Pero no te preocupes, Raúl tiene que haberselo llevado.
-Ojalá Melisa, ojalá, ese auto me costó los 2 años de trabajo que tengo.
-Ya oh!, no te preocupes más, yo te voy a ver para que almorzemos juntas, llevo un poco de comida china que compré anoche.
Mientras tanto ordenaba, el celular suena... un mensaje:
"prdon x djart sola, yo m llvé l auto, t voy a vr n 5"
Y exactamente en 5 minutos llegó Raúl. Estaba como lo había visto la otra vez.
-Qúe chucha pasó anoche?
-Fuimos a un club.
-Me drogaste?
-Tu te tomaste el trago.
-Por qué me llevaste ahí?
-Porque aceptaste ser mi polola, porque me tienes que conocer, para que conozcas como vivo yo.
-Dijistes que cambiarías.
-Yo no dije eso, tu dijistes que me ayudarías y yo te dije que no. Y tu insististes, pero yo no respondí.
-Pásame las llaves de mi auto, y sal cagando de mi casa.
-Samanta pero...
-Ándate, asqueroso, te odio, ándate!
Raúl entregó las llaves, y se marchó.
Samanta se tiró en su cama, lloró todo el día. Cuando llegó Melisa, no hizo más que llorar, mientras le contaba todo lo ocurrido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario