Emily corrió de espalda insistiendo en que las balas le harían algún daño, pero era inútil, el monstruo ni se inmutaba, y la balas sonaban en el como si fuera una muralla de hierro.
La desesperación la inundó y lo golpeó con todas sus fuerzas. El monstruó retrocedio, sin embargo, su retroceso fue el impulso que tomó para golpearla aún más fuerte de lo normal.
El empujón la volteó y logró las dos grandes puertas que estaba a sus espaldas cuando disparaba. Conocía esas dos puertas, como de un sueño; claro! eran las puertas de su recuerdos vagos, eran las puertas que Victor quiso mostrarle. Ahora todo se hacía demasiado claro, sabía lo que pasó, entendia por que estaba en la situación que estaba, y sabía perfectamente como acabar con la criatura.
-Hay que quemarla!- le gritó a Kevin y Valerie que seguían disparando.- Deben lanzarle fuego.
-Fuego...- susurro Valerie.- Sé exactamente que hacer.
Con rapidez Valerie sacó un encendedor de su bolsillo, y de la mochila de Kevin, retiró un envase de lo que parecía ser desodorante o algo parecido. Con el mango de la pistola lo golpeó y lo abrió un poco, prendiendole, fuego al agujero.
-Cubranse!- gritó y lanzo con todas las fuerzas la granada que había preparado.
El objeto no tardó mucho en explotar y formar una llamarada que cubrió la habitación por unos segundos, pero los rugidos de la bestia habían cesado, estaba muerta.
Emily se levantó con cuidado y la pateó para corroborar su teoría, definitivamente no tenía vida. Ayudó a levantar a su compañera y le pidio a Kevin que se pusiera de pie, tenían que continuar.
Sus recuerdos no estaban incompletos, sin embargo, hay muchas cosas que Victor nunca le contó, y no sabía que sucedió con él. Detras de las puertas seguramente estaba la respuesta.
-Que demonios es esto!?- fue la primera expresión que dijo Valerie al ver el enorme laboratorio.
-Un centro de investigaciones.- respondieron los otros dos a coro.
-Ok... y para que sirve?
Ambos de nuevo respondieron al mismo tiempo, diciendo distintas cosas, haciendo la comunicación imposible.
-Hablen de a uno, por que no entiendo que intentan explicarme.
-Es un centro de investigaciones.- interrumpió Em.- Acá abajo trabajaba Victor, entró en un programa que elaboró el gobierno para poder derrocar el país Ruso.
-Espera, creí que esas disputas se acabaron cuando se botó el muro de Berlín.- se impresionó Valerie.
-No completamente, aún existían políticos fascistas dentro del país, deseosos de poder.- respondió Kevin.
-O demasiado paranoicos.- se interpuso Em.- Victor me dijo que estaba trabajando en ésto, bajo directas ordenes del presidente por que, según éste, Rusia preparaba un ataque viral para acabar con la megapotencia americana. Así que debiamos contraatacar, y lo encargaron a él por ser el mejor médico del país, y el más débil, para que desarrollara el virus.
-En medio de Los Ángeles?- Valerie seguía perpleja.
-Culparían a Rusia si algo salía mal.- intervino Kevin.- Entonces Victor entró el programa por que la paga era increiblemente alta, aunque él nunca vio un centavo de nada. Mi hermano era un espía perfecto, entonces se encariñó de un chico, se hiso pasar por homosexual, y provó el virus sobre él.
El chico no sobrevivió... Se llamaba Jack.
-Entonces me contactaron a mi.- continuó Emily.- una agente especial del centro de investigaciones ruso para que investigara de cerca a Victor, lo enamorara y le sacara información. Terriblemente me enamoré yo de él también. Renuncié a mi cargo, y me dijeron que me arrepentiría si contaba algo. Esa misma tarde Victor me trajo acá, y no podía decirle una sola palabra de ésto, no en esas circunstancias. Fue entonces cuando me mostró "su más preciada creación".
-La bestia.- susurró Kevin.
-Si, me dijo que era Jack, mutado, que había salido algo mal con su composición genética y que se trasformó en eso. Me contó que en un principio preguntó si podía asesinarlo, pero le negaron la petición y además le pidieron que mejorara su estructura ósea, que lo transformara en algo casi invencible. Y casi lo era, sin embargo, el fuego seguía siendo su debilidad, el calor de una bala es muy pequeño para afectarle, pero el fuego en sí, le derrite sus huesos, y acaba con él de inmediato.
-Que sucedió con Victor?- preguntó Kevin.- dónde está mi hermano?
-No tengo idea.-
Los tres se quedaron mirando los alrededores, reflexionando sobre la historia que acababan de escuchar, de cómo sucedieron todos esos hechos.
Valerie miraba el techo, fuertemente reforzado, y jugaba con el gatillo de su pistola cuando una mano le tomó el pie con fuerza. La pateó y apuntó donde sintió que provenía lo que la había tocado, pero no había nada. Absolutamente nada.
-Chicos, hay algo aquí dentro.- gritó.
-Lo sé.- respondió Em con calma, y por supuesto, con sus ojos cerrados
-Dónde está?- susurró Kevin.
-Espera.
Seguía concentradísima. Veía de una manera increíblemente nítida, los alrededores, sin necesidad de abrir los ojos. Tomó su arma con mucha calma, entonces Kevin la detuvo.
-Toma ésta, es mucho mejor.- le pasó una escopeta cómoda y potente.
-Gracias.- sonrió en respuesta.
Volvió a cerrar los ojos, y en cuestión de segundos se puso en una posición ofensiva y disparo... Falló.
Repitió el proceso anterior, y disparó otra vez, ésta vez acertó.
La criatura era delgada, pero por su estructura ósea, parecía estremadamente ágil. Se retorcía en el suelo por el dolor de la bala.
-Victor.- susurraron Kevin y Em al mismo tiempo, perplejos.
-Qué!?
La bestia se puso de pie y atacó al primero que tuvo enfrente, su propio hermano.
Valerie se desesperó y comenzó a gritar, disparandole, pero era inútil, la criatura no lo soltaba.
-Vayanse.- se retorcía Kevin.- Sálvense.
Con dificultad sacó una granada que tenía en su bolsillo y se las enseño a las dos chicas. Valerie con lágrimas en los ojos corrió. Emily se quedó mirándolos y luego tomó a Valerie del brazo para correr más rápido a la salida.
-Adios hermanito.- pronunció Kevin, quitando el pestillo de la bomba.
La explosión retumbó en toda la ciudad, y la dañada infraestructura del edificio no parecía resistir, el edificio caería.
Valerie jamás había corrido tan ágilmente en su vida. Con pedazos del techo cayendo sobre ellas, lograron escapar a salvo, con un dolor enorme en sus corazones luego de perder a un fiel miembro de su grupo.
Emily tomó un enorme respiro, lo peor había pasado, ahora sólo tenían que llegar a la comisaría...
FIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario